Vía ferrata de Villena

En nuestro club, como no puede ser de otra forma, tenemos inquietudes y ganas de aprender y practicar nuevas modalidades para disfrutar más aún, si cabe, de nuestras montañas. Por ello, para este primer trimestre del año programamos una serie de vías ferratas con la ayuda de Manolo (Técnico Deportivo en Montaña y Escalada, y nuestro "Sensei" particular en temas verticales...)que nos sirvieran para iniciarnos e ir progresando en dificultad con total seguridad.
Para empezar, nos fuimos hasta Villena a por la primera de ellas. Nos quedaba un poco lejos, pero consideramos que era perfecta para comenzar, ya que se trata de una ferrata sencillita que combina algunos tramos verticales  con travesías en horizontal y dos puentes, tibetano y nepalí, por lo que se hace entretenida a la par que fácil. Además, hay una instalación de rapel para descender la vía evitando el rodeo de la senda, y así podíamos practicar y aprender los que nunca habían rapelado.
Esta vez el grupo fue reducido, solo cuatro más Manolo, ya que algunos con conocimientos de escalada se saltaban la primera y otros, al coincidir con las fiestas de Sant Antoni, pensaron que no estarían en condiciones...y tenían razón!!! jejeje.
Así que acudimos a la cita Lourdes, Bego, M. Àngels y servidor, que se apunta a un bombardeo y mucho más con semejante compañía... Recogimos a Manolo en Godella, y tras poco más de hora y media de coche, nos plantamos en Villena. Comenzamos la aproximación, y al poco nos dimos cuenta que cogimos la senda equivocada, pero lo solucionamos con una buena travesía montaña a través, de esas que solemos hacer a veces. Con este comienzo accidentado, nos plantamos en el collado desde el cual ya vemos la ferrata  un poco más abajo. Allí, mientras nos íbamos equipando, Manolo nos fue dando las primeras indicaciones respecto al equipo y progresión. Después, ya equipados, comenzamos la bajada hasta el pie de vía, ya asegurados a la línea de vida instalada. Pasamos la primera de las ferratas, donde había gente subiendo, ya que nosotros íbamos hacia la segunda de ellas, rodeando un poco más la montaña. Llegamos a  pie de vía, nuevas indicaciones del sensei y comenzamos, disfrutamos sin ningún problema de toda la ferrata hasta su fin, donde aprovechamos para almorzar con las vistas desde las alturas. Luego, solo pudimos hacer un tramo de rapel, pero estuvo bien para iniciarse algunas de las chicas. destrepamos el resto de la vía, nos volvimos al coche y para casa, pasando por Godella a tomar unas cervecitas de despedida.
En definitiva, fue un estupendo día, lo pasamos genial, aprendimos algo nuevo y además, personalmente, me deleité con las historias de Manolo, a quien siempre bombardeo con mis preguntas.
Gracias a las chicas por su compañía y a Manolo por trasmitirnos su sabiduría, nos veremos en próximas aventuras, siempre en las montañas