Gudar - Barranco Umbrías.

Después de las últimas aventuras que hemos tenido, y como ya van apretando los calores por aquí, en la reunión que tuvimos para fijar el calendario de rutas de julio - agosto buscamos salidas a sitios mas frescos, a ser posible con agua, y nada mejor para empezar que subirse a Gúdar, provincia de Teruel, para hacer una ruta muy asequible por sus bellos parajes.
Se trata de una ruta señalizada como PR-TE 33, que hace dos bucles en forma de ocho, pero haciendo solo uno de los bucles, la parte que corresponde al precioso barranco umbrías.

Preciosa ruta la de hoy.

Como siempre toca madrugar, aunque esta vez no demasiado ya que la ruta es corta, solo 12 km, por lo que en 3 o 4 horitas está hecha, así que a las 7:00 un nutrido grupo de Rotipeter@s se encuentran en la puerta del local, dispuestos a disfrutar de lo lindo.

En la puerta del club, una buena banda.

Un rato después llegan al bonito pueblo de Gúdar, que da nombre a toda la sierra, y como anunciaban las previsiones les recibe un día fresquito, fresquito.
La mejor manera de entrar pronto en calor es ponerse a caminar, así que enseguida se ponen a ello, saliendo del pueblo por una pista, al principio con menos vegetación, pero enseguida se meten de lleno en los bosques tan frondosos que hay por estas tierras.

Llegando a Gúdar.

Al principio con niebla y fresquito.

Al poco de dejar la pista.

Poco a poco rodeados de bosque.

Disfrutando del camino, se van aproximando a la zona recreativa de la fuente de la dehesa, y después por una senda se baja ya hacia el río.

Con un grupo así da gusto rutear.

Josevi entrenándose con los bastones para el ultra de Andorra.

Paisajes de la sierra de Gúdar.

Frondosos bosques de pino.

Sonia y Juan Pablo.

Idílico, ¿verdad?

Josevi y Morant.

como siempre... ¡haciendo la mona!

Me encanta el brillo del agua en esta foto.

Bastón último modelo, tecnología aeroespacial...

Josevi en la fuente de la dehesa.

Todo el grupo en el área recreativa.

El amigo Bihain se aparece en cuanto menos te lo esperas...

¡Siempre trepando!

Disfrutando del entorno y del solecito.

Una vez en el río, hay que cruzarlo varias veces, siempre buscando por donde discurre la senda, que recorre este tramo de gran belleza junto al río, con algunos saltos de agua que lo hacen todavía más espectacular.

Ya en el río.

 Veamos los diferentes estilos rotipeteros cruzando el río....

Estilo chiquito...no puerdor, no puedor...

Estilo bailarina...

Estilo ahí va això!!!

Silvia imitando a Josevi como chiquito, eso si, con mas glamour...

Y para terminar estilo Karate kid!!!

No se que quiere Joserra de Mónica en esta foto....

Una maravilla.

Joserra y Mónica.

Alberto y Dori.

Precioso paraje.

Una pasada de barranco.

Vista atrás al barranco umbrías.

Muy guapa la Mónica!!!

Otra más del barranco.

Gandalf, como decía el presi...

Morant desafiando a la gravedad...y Dori a punto de darle!!!

Precioso rincón.

Sonia y Juan Pablo chupando cámara.

Mira pues...vaya tres!!!

Todo el grupo.

Refrescante y bonita foto del presi.

Josevi delante de una cascadita.

En esta ruta algunos estaban muy románticos, ¿no?

Último cruce.

Ay, ay, ay....jejeje.

Después del atracón de agua que se dieron, solo queda regresar al pueblo a disfrutar de las bien merecidas cervezas de rigor, pero antes tenían que superar el último repechón por asfalto para entrar al pueblo.

Los restos del almuerzo de Pomelito.

Dori disfrutando.

Regresando ya hacia el pueblo.

Me encantan los cielos de estas tierras...puros!!!

¿Alpe d'huez? nooo, entrada a Gúdar!!!

Lo mejor del día.

Satisfaction!!!!

Como demuestran las caras de los amigos en las últimas fotos, fue un gran día. Un paisaje grandioso, la mejor de las compañias, en fin, como decía al comienzo, la mejor manera de resarcirse del sufrimiento de la Casella.
Es un placer para mí ver a Dori, con lo que sufrió aquel día, tanto que no quería venir más en aquel momento, disfrutando así de nuevo.
También es un placer ver un grupo grande, que por desgracia no se da muchas veces, o por lo menos no cuando voy yo...
en fin, visto y oído lo que disfrutaron ese día, otra más que tendré que hacer por mi cuenta para que no me lo cuenten.
Como siempre, hasta la próxima, y nos vemos en las montañas.